México se ha posicionado como el segundo mejor productor pesquero y acuícola de camarón en Latinoamérica y séptimo a nivel mundial, dentro del Top 10, de acuerdo a un reporte de la Organización de la Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés).
El Comisionado Nacional de Acuacultura y Pesca, Octavio Almada Palafox informó que de acuerdo a los registros preliminares de enero a diciembre de 2023, la captura nacional de camarón fue de más de 50 mil 800 toneladas, equivalentes a más 4 mil 100 millones de pesos.
La Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (CONAPESCA), en el rubro acuícola de camarón, dio a conocer que la información estadística nacional preliminar de 2023 obtenida de los avisos de cosecha, indica que en dicho periodo se alcanzó una producción de más de 192 mil 600 toneladas, con un valor económico equivalente a más de 19 mil 800 millones de pesos.
Especificó la dependencia que la producción nacional de captura de camarón de altamar en todos los litorales de jurisdicción federal, en dicho periodo, llegó a más de 20 mil 600 toneladas, que representó más de mil 800 millones de pesos.
En el caso de la producción de camarón ribereño llegó a más de 30 mil 200 toneladas, equivalentes a más de 2 mil 200 millones de pesos.
La estadística oficial indica que Sinaloa registró, preliminarmente, más de 8 mil 400 toneladas de camarón de altamar y más de 14 mil 300 toneladas de camarón capturado por embarcaciones menores.
Sonora registró más de 4 mil 700 toneladas de altamar y más de 6 mil 500 toneladas de camarón ribereño, Tamaulipas más de 5 mil 300 y más de 2 mil 900 toneladas, respectivamente.
Otros Estados con gran potencial productor son Campeche, con más de mil 040 toneladas por embarcaciones mayores y más de 800 toneladas por embarcaciones menores; Veracruz, con más de 400 y más de 700; Oaxaca, con más de 370 y más de 400; Nayarit, con más de 48 y más de mil 900; Chiapas, con más de 212 y más de 500 toneladas, respectivamente.
DERRAMA ECONÓMICA EN FEBRERO
La CONCANACO SERVYTUR México proyecta una derrama económica que superará los 28 mil millones de pesos con motivo del Día del Amor y la Amistad, que se celebra el miércoles 14 de febrero. Los principales giros beneficiados serán el hospedaje, los restaurantes, las tiendas departamentales, las dulcerías y las florerías.
Para este 14 de febrero y el fin de semana subsiguiente, las 257 Cámaras de Comercio, Servicios y Turismo afiliadas al organismo cúpula tienen altas expectativas de incremento en las ventas debido a la festividad de San Valentín, previéndose un aumento del 12 por ciento con respecto a la inyección económica registrada en 2023.
Héctor Tejada Shaar, presidente de Confederación de Cámaras Empresariales, resaltó que esta celebración será un poderoso motor para la economía de México, pues el sector de Comercio, Servicios y Turismo continúa representando más del 60 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) nacional. «El Día del Amor y la Amistad contribuirá al crecimiento económico del país y al bienestar de las familias que dependen del comercio formal», subrayó.
CALIFICACIÓN FAVORABLE
En su comunicado, S&P Global ratificó la calificación de la deuda soberana de largo plazo de México en moneda extranjera y local en BBB y BBB+, respectivamente. Ambas, con perspectiva estable, por lo que se prevé que la agencia deje estable la calificación durante los próximos 12 a 18 meses.
A pesar de ser un año electoral, la agencia espera que México continúe con prudencia fiscal y monetaria en lo que resta de la actual administración, que permita una transición ordenada y estabilidad política tras las elecciones de 2024.
Destacan la prioridad del Gobierno de México en buscar políticas que mantengan la firmeza de sus finanzas públicas, por lo que proyectan que el nivel de deuda neta del Gobierno general se mantendrá por debajo de 50 por ciento en el mediano plazo.
La calificadora destacó el crecimiento anual del PIB mayor a 3 por ciento en 2023, mismo que sorprendió al alza como resultado de la fortaleza en la demanda interna, en línea con una moderación en la inflación, en un contexto global complejo. La perspectiva estable, además, incorpora la expectativa de una cautelosa ejecución de política económica, sin cambios que puedan afectar al clima de negocios.