Por: José Efraín Caballero Sevilla
México ha padecido los efectos de la pandemia como en todo el mundo, resultando afectado en la salud de su población, pero además de esto, se han afectado gravemente la economía y las finanzas públicas.
El daño ha sido más grave, en lo que se refiere a los ingresos económicos de la población, dada su necesidad de subsistir, al haberse cerrado de manera temporal y en otros casos, de manera permanente, miles de fuentes de empleo, que se generaban en el comercio y la prestación de servicios.
La pandemia ha impactado de diversa magnitud la economía de las naciones del mundo, mientras algunas han sufrido pérdidas enormes que van desde un monto de 31 por ciento en el PIB como en la economía de Estados Unidos en meses anteriores, hasta países como China que lejos de caer, han crecido.
Debido a las turbulencias financieras provocadas por el Covid 19, México se encuentra en un estado intermitente, pero en el que afortunadamente ha venido recuperándose gradualmente, ya que la buena noticia es que nuestra economía en este tercer trimestre, registró un crecimiento del 12 por ciento en comparación con el trimestre anterior, según cifras dadas a conocer por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
Pese a este incremento, la economía nacional continúa en promedio con un decrecimiento del 8.6 por ciento, con respecto a cómo se encontraba antes de la pandemia. Pero cabe señalar que no permanece en una situación tan complicada como les ha ocurrido a otros países a nivel mundial.
Según diversos organismos internacionales, señalan que América Latina será la región más golpeada a nivel mundial en lo económico, va a ser su peor crisis en un siglo. Así que lo que esto representa, no es cualquier cosa.
La noticia es que México mantiene una deuda fiscal muy inferior comparada a las mejores economías Latinoamericanas, como Brasil y Argentina que su deuda fiscal es casi del 100 por ciento de su PIB, y México ronda el 50 por ciento, lo que le da mayores posibilidades de contar con recursos para afrontar la problemática financiera, producto de la crisis sanitaria.
El recrudecimiento en el número de infectados, es el principal factor de riesgo para que se diera una nueva desaceleración en nuestra recuperación económica, ante las medidas que serían necesarias implementar.
El cierre de los comercios, como medida sanitaria ante la llegada del semáforo rojo en las distintas entidades, llevaría a un estancamiento financiero, nos haría regresar a la parálisis económica de meses anteriores.
Por lo cual es muy recomendable mantener las medidas sanitarias, que eviten problemas de salud en la población, y que en consecuencia nos lacere la otra pandemia que le acompaña, que es la crisis económica, y seguirán haciendo una mancuerna hasta que llegue la esperada vacuna.
La cada vez más latente llegada de la vacuna contra el Covid, por parte de la compañía farmacéutica Pfizer, les ha dado a las bolsas de valores en el mundo un impulso en sus indicadores, y así, los que saben de finanzas, mandan una buena señal a la población, que desea se resuelva este problema de salud sin precedentes en este siglo.
Así que la recomendación, es mantener las medidas precautorias en salud, evitando aglomeraciones y portando los insumos necesarios para evitar contraer la enfermedad del Covid 19, que consecuentemente afecta la salud económica personal.
Querido lector, tenga un excelente día nos leemos la próxima.
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